La insatisfacción laboral está determinada muchas veces por malas relaciones con jefes y compañeros, un ambiente de poco desarrollo, inconformidad por no tener una buena remuneración, e incluso, por llevar los problemas de casa al trabajo y viceversa.
Las empresas deben ser capaces de crear buenas prácticas y políticas que promuevan la formación de una familia laboral; sin embargo, cada uno tenemos nuestra cuota de responsabilidad para ayudar a crear un buen clima y mejorar las relaciones, lo cual ayudará a sentirse mejor y aumentar la propia productividad.
Te damos unos prácticos consejos para lograr disfrutar tu trabajo:
- Date algún tiempo por las mañanas antes de trabajar y dedícalo a ti, lo cual te permitirá comenzar el día con mejores ánimos y una sonrisa.
- Predisponte a trabajar. Cada día ingrese a su trabajo con la idea que puede hacer algo nuevo, algo creativo que puede ser muy útil para la empresa.
- Automotivación. Puedes disminuir la carga para ir a trabajar si logras buenas relaciones con sus compañeros y un ambiente físico estimulante.
- Trabaja a un paso agradable. Intenta desarrollar la misma actitud en el trabajo, necesitas trabajar en un ritmo que funcione para ti.
- Toma una pequeña pausa antes que empieces una nueva tarea. Tu mente necesita un momento para prepararse entre cada actividad.
- Sé consciente de lo que estás haciendo y su finalidad. Enfócate, no vale le pena perderse en pensamientos porque te bloqueas.
- Haz lo más importante primero. No malgastes energía con proyectos que no son tan trascendentes en el día a día; maximiza tu rendimiento y realizar las tareas más importantes primero, postergar solamente causa angustias.
- Olvídate del trabajo. Procura disfrutar de un “break” y tu tiempo para comer. Intenta encontrar alguna técnica de relajación que puedas poner en práctica.
- Cuando sientas que no puedes controlar el mal humor, trata de no desquitarlo con un compañero o situación relacionada con tu empleo. Tampoco hables mal de un compañero frente a otro.
- Plantéate metas semanales: éstas deben ser personales; así podrás mantenerte motivado y te sentirás útil.
- Lo ideal es premiarte una vez que las hayas completado.
- Realiza alguna actividad para revitalizarte después del trabajo. Puede ser ejercicio, baile o una buena caminata.
- Consiéntete a ti mismo. Reconoce tu esfuerzo y date las gracias; encuentra nuevas formas de demostrarte que te amas y cuídate.
En la actualidad muchas empresas han adoptado prácticas de recreación incluidas en políticas laborales, lo cual ha dado excelentes resultados, mejorando el clima y aumentando significativamente la productividad individual y colectiva.
Por ello, sácale el mejor provecho a tu empleo, identifica las cosas que despiertan su interés, que te apasionan y que aportan algo positivo a tu vida, lo cual te permitirá crecer como persona y profesionista. ¡Ánimo y disfruta tu trabajo!